A lo largo de su historia, San Sebastián ha tenido doce plazas de toros.
San Martín, la primera de ellas, fue construida especialmente para los espectáculos taurinos. Se inauguró el 16 de agosto de 1851 y tenía capacidad para 6.000 espectadores. Con el fin de aprovechar la plaza en más ocasiones, tenía un tendido desmontable. Conjuntamente por aquella época, se utilizaba la actual Plaza de la Constitución para también albergar festejos taurinos.
El aforo de ambas pronto se quedó pequeño y fue necesaria la construcción de un nuevo anfiteatro. En 1870, se levantó en el mismo solar que ocupaba la antigua plaza de toros de San Martin una nueva. Era toda de madera y en su interior cabían 9.000 personas. Debido al material empleado, la plaza quedó destruida por un incendio en 1878.
Afortunadamente, en el año 1876, el empresario José Arana, creador de la Semana Grande Donostiarra, construyó otra plaza, también de madera, junto a la estación de ferrocarril, la de Atocha. Se inauguró el 16 de julio de 1876. Estaba situada en la actual plaza que está entre la Torre de Atocha y la Tabacalera. Como la plaza principal quedó arrasada en el incendio, se aprovechó esta provisional y en 1882, se procedió a su primera reforma. Posteriormente, se fueron cambiando las maderas por hierro y mampostería para dar a la plaza un aspecto más estable y mayor seguridad. La última modificación se inició en 1888 y tras ella quedó una plaza suficientemente amplia para que 10.000 personas pudieran ver los espectáculos en buenas condiciones.
Por dicha plaza, en los años 1880 a 1882 desfilaron los más famosos matadores españoles, lidiadores franceses y los mejores rejoneadores portugueses. Las primeras corridas que se realizaron de noche con luz eléctrica fueron en esta plaza. Y así, el 31 de agosto del año 1886 se celebró la primera corrida de toros nocturna de la historia.
A principios de siglo se alzó una corriente de opinión en contra del presidente Arana, reprochándole que contrataba siempre a los mismos toreros y fruto de aquel resentimiento popular fue la constitución de una nueva empresa que construyó la plaza de toros del Chofre en 1903. Durante varias temporadas estuvieron funcionando las dos plazas hasta el cese y derribo de la de Atocha.
La Plaza de toros de “El Chofre” se inaugura el 9 de agosto de 1903 con nueve toros de Ibarra, lidiados por Mazzantini, Bomba, Montes y Lagartijo Chico. La plaza se situó entre la carretera de Pasajes y la playa de Zurriola en el barrio de gros y contó en su entorno con todas las comodidades posibles para hacer más agradables los prolegómenos. La plaza albergaba unos 15.000 espectadores aproximadamente.
Por la arena de “El Chofre” pasaron los toreros más grandes de cada época. Belmonte, Manolete o Gallito son sólo algunos de los nombres que dieron esplendor, durante casi 70 años, a un coso histórico. En su día El Chofre fue considerado el cuarto coso taurino mas importante de la temporada después de Madrid, Mexico D.F. y Sevilla. Los tendidos también tuvieron pobladores de excepción. Además de todos los personajes importantes de la sociedad española, gente como Hemingway, Charlton Heston, Orson Welles o Charles Chaplin añadieron mayor luminosidad a una plaza que hoy, ya es historia. El 2 de septiembre de 1973 se celebró el último festejo. Se lidiaron reses de Carlos Núñez siendo los matadores El Charro, Aparicio, El Litri y Antonio Ordoñez. La plaza fue demolida por motivos urbanísticos y lamentablemente la afición donostiarra tuvo que esperar 25 años para volver a disfrutar de su pasión en su ciudad.
Tras un cuarto de siglo sin toros en la capital guipuzcoana la plaza de toros de Illumbe, de 1ª categoría, se inaugura el 11 de Agosto de 1998 por los diestros Jose Maria Manzanares, Enrique Ponce, Francisco Rivera Ordoñez con una corrida de Torrestrella. La plaza de toros de San Sebastián pionera en comodidad y espacio multiusos cuenta con una cubierta móvil que permite poder celebrar cualquier tipo de espectáculo durante todo el año. El coso cuenta con alrededor de 11.000 localidades distribuidas en 11 tendidos. A lo largo de su historia alrededor de 900.000 espectadores han disfrutado de mas de 150 espectáculos taurinos en Illumbe.
La actividad principal de las corridas de toros en Illumbe se desarrollan en torno a la Semana Grande Donostiarra, motivo por el que se creo, aunque durante varios años también se han organizado multitud de festejos fuera de feria como los certámenes internacionales de novilleros y la corrida de regatas.